Cuando hablamos de la gestión de las personas y los equipos que conforman Autogrill, Octavio Llamas, su director general, tiene mucho que decir… tal y como le contó a la directora de Canal CEO, Elisa Carreras, la compañía italiana líder mundial de la restauración en ruta, tiene muy claro que sus empleados son los primeros embajadores de la marca, y por lo tanto los tienen que cuidar.
Filosofía FIFO : First In, First Out
La venta de un bocadillo tiene un valor concreto que viene dado por los ingredientes, lo crujiente del pan… sin embargo el valor diferenciador lo da el servicio, el trato de quién lo sirve y cómo lo sirve. Y para eso primero se tiene que cuidar a ese empleado en cuestión, para que la filosofía de la compañía corra por sus venas y pueda convertir ese bocadillo en una experiencia agradable.
Octavio Llamas nos explica que tiene dos tipos de cliente, el consumidor final y sus clientes internos, es decir, sus empleados. Para gestionar estos dos perfiles distintos, aplica la filosofía FIFO, “First In, First Out”: para cuidar a sus clientes internos, sus empleados, tiene que ofrecerles herramientas para motivarse y transmitirles vitalidad y pasión. Y una vez que se ha transmitido esa filosofía a sus empleados, es cuando ellos la trasladan al consumidor final
Gracias a esta filosofía, consigue que sus empleados no sólo vendan productos de un determinado valor, sino que también se genere un compromiso con la compañía y con el cliente. Cuidar del bien estar de los empleados para que ellos cuiden del consumidor final… Una de las recetas del éxito de Autogrill.
Cuando habla de su relación con sus colaboradores más cercanos, Octavio Llamas tiene un eslogan: “libertad de crítica, unidad de acción”. Para él es fundamental crear un espíritu de equipo generando debate, fomentando el diálogo, “porque si tú estás fomentando el debate, estás creando equipo” y al escuchar la opinión de cada uno haces que se sientan integrados en la empresa, eso sí: “una vez tomada la decisión, todos juntos”. Respecto a los verdaderos amigos, Octavio piensa que no se reconocen hasta que dejas la empresa, ya que mientras trabajas en el mismo sitio, como compañero ó como jefe de tu amigo, no sabes si pesa más la amistad ó la relación profesional.
Entonces… ¿cómo gestiona el director general de Autogrill las personas de su equipo? A lo que Octavio contesta rotundamente: “La respuesta es liderazgo,… que se demuestra mediante un comportamiento ejemplar y carismático”. El director general de Autogrill Iberia confiesa que siempre le ha gustado sentir cierta admiración hacia sus jefes, porque necesita ver que con ellos se forma y aprende las cosas que se deben hacer y las que no. Y eso mismo es lo que le gustaría que sus empleados sintieran por él.
Responsabilidad, ética y sobre todo, “compromiso en el sentido de pasión y dedicación por hacer las cosas”. Añade que los buenos líderes tienen que ser un buen ejemplo para su equipo, “tienes que ser el primero en remangarte y estar ahí”.
La importancia del reconocimiento laboral
Cuando hablamos de la importancia del salario emocional frente a una remuneración económica alta, Octavio Llamas insiste en que a pesar de que el dinero es fundamental para vivir, “es simplemente la base, porque cuando alguien viene a un sitio a pasar más de 8 horas al día, no se motiva simplemente con dinero”. No debemos olvidar que “trabajamos personas y las personas buscan reconocimiento, satisfacción personal y autodesarrollo”. En este sentido, Octavio recuerda que “una palmadita en la espalda en el momento adecuado es una gran recompensa, más que el dinero”.
Y en Autogrill, ¿cómo se muestra el reconocimiento a los empleados, cómo se retiene el talento? Identificar el talento no siempre es algo fácil, asegura Octavio y retenerlo es aún más complicado, así que la compañía ha apostado por dar a conocer el buen hacer de sus empleados. Algunas ideas que comparte con Canal CEO son: la celebración de concursos nacionales en relación a temas gastronómicos, como la caña mejor tirada ó el mejor tirador de cappuccino… estas acciones, en palabras del director general de Autogrill, sirven para generar en sus empleados una motivación extra por llegar a ser el número uno, por hacer bien su trabajo, por obtener el merecido reconocimiento, alcanzar la excelencia es la meta, y sobre todo por generar emoción.
“Esto crea empresa, crea equipo, crea liderazgo, competitividad y además un ambiente sano, porque hay que educar a la gente para que lo hagan bien y puedan ser felicitados”.
